Ayer me asaltaron!

Caminaba por una calle cerca de la CAPU luego de haber grabado un video en una escuela, mandaba un mensajito en mi celular cuando de pronto un entre 3 vatos me agarran desprevenido, me arrinconan y me amagan...

"Que traes ahí, que traes ahí! No me veas hijo de la verga!"

Recibo un golpe en la cara con lo que a primera impresion parecía el mango de una pistola.

"Que no me veas hijo de la chingada!"

De nuevo otro golpe en la cara, me quitan el ipod...

"Que traes en la bolsa que traes en la bolsa!"

Me quitan la cámara, me quitan mi celular. Otro madrazo en la cara y adios.

Me chingaron mi cámara de video, y me chingarón mi ipod. Todo fue tan rápido que ni tiempo tuve de reaccionar, sólo pensaba en una cosa, en que no me quitaran el reloj que traía que era de mi papá.

Pero en realidad mi intención no es hacer del asalto lo relevante de esta entrada, sino otra cosa. Yo creo que tengo severos problemas, porque siempre me fijo y me ocupo en las cosas que no son precisamente las más importantes. Y siempre trato de encontrarle el lado amable a las cosas...y ustedes se preguntaran: "qué le puede encontrar este vato de amable a todo esto, si lo asaltaron, le pegaron en la cara, le robaron su cámara de video, su ipod, su celular?"

Pues...

Una vez que me quitaron todo y ya estaban alejados, uno de ellos me grita, como yo todavía estaba en shock lo que hice fue voltear. En eso veo que al puritito estilo de softball me tira algo. Lo veo por los aires mientras esta a punto de caerme encima, lo atrapó, y no lo puedo creer...

...

Era mi celular!!! Mi celular que cuando lo compré era el más barato del mercado hace 3 años. Un pedazo de porquería que a veces ni agarra bien la señal, que la caja de la batería la tengo amarrada con cinta adhesiva porque si no se le cae, un celular al cual le tomaría una foto y lo pondría en el blog...pero no tengo cámara para hacerlo. Osea, que tan jodido está mi celular que los asaltantes lo vieron, y se dieron cuenta de que no les iba a servir de nada...

No! Ayer no será recordada como la tarde en que me asaltaron, ayer será recordada como la triste tarde en que unos asaltantes:

me robaron un celular...

lo vieron...

me lo devolvieron...

Alratillo!